Hola pequeñx lector/a!
Te voy a compartir una frase que me escribió mi madre en su carta de felicitación por haberme graduado cuando terminé la carrera y la cuál me quedó grabada.
«Y ahora alza tus alas y vuela, vuela alto pequeña».
Desde entonces me acompaña siempre, como un lema, como una parte de mí que me ayuda a tomar decisiones por muy arriesgadas que sean.
Todos los pasos que he dado me han llevado a donde estoy ahora, a este punto de mi vida y sé que lo que está por venir es bueno.
Hace años que una idea, una aventura me rondaba la mente, pero las circunstancias personales y ajenas no hicieron que pudiese llevar esa idea a cabo. Hasta ahora.
No te voy a negar que tengo miedo. Miedo a viajar sola a un lugar desconocido, a no saber qué voy a encontrarme allí cuando llegue, como me van a recibir, si sabré estar a la altura…
Pero, ¿sabes? Me puede más el sentimiento de vacío que noto. Necesito encontrar algo que me motive, saber que estoy aportando, que puedo ayudar en algo y sé que este es el momento.
Ya tenemos una fecha pequeña, un día marcado en la agenda en el cuál te vas a ir para volver con el nuevo año siendo una nueva tú, feliz, plena.
Cada día que pasa te acerca un poco más al viaje que te cambiará la vida y no puedo estar más emocionada por ello.
Ahora, pequeñx lect@r, quería pedirte algo.
No tengas miedo por las decisiones que quieras tomar. Todas y cada una de ellas te van a llevar a lo que estás destinad0 a ser. No te quedes con el “que hubiese pasado si…” La vida es muy corta y nadie sabe su fecha de fin, aprovéchala al máximo y haz todo lo que quieras. Solo tú eres el autor/a de tu destino.
Grábate esta frase que tanto me ha ayudado a mí y que llevo siempre conmigo porque te prometo que si haces lo que realmente quieras y no dejas que nadie te corte las alas serás realmente feliz y llegarás lejos.
Asique por favor, abre tus alas y vuela, vuela bien alto.
Nos leemos pronto.
Ángela.